From Samaria to Bethsaida. Eleventh stage of Francisco Guerrero's journey to Jerusalem (1588)

Ruiz Jiménez, Juan
Real Academia de Bellas Artes de Granada
0000-0001-8347-0988

Abstract

The eleventh stage took Francisco Guerrero and Francisco Sánchez from Samaria to Bethsaida, on the shores of Lake Tiberias, crossing the plains of the province of Galilee, from where they contemplated sites such as Burquin, Nazareth, Mount Tabor and other places with deep biblical significance.

Keywords

journey , Francisco Guerrero. El viaje de Jerusalén , Itinerary of Francisco Guerrero's journey to Jerusalem , mapping Francisco Guerrero , Francisco Guerrero (composer, chapel master) , Francisco Sánchez (musician) , Atala (traslator) , franciscans friars


Francisco Guerrero sigue sin proporcionarnos fechas precisas para esta jornada de su viaje de regreso a Sevilla, pero debió transcurrir ya en la primera mitad del mes de noviembre de 1588. En compañía de su discípulo Francisco Sánchez, de los siete frailes franciscanos, los seis peregrinos y el trujamán Atala, con los que había partido de Jerusalén, continuaron viaje por Palestina. Desde Samaria pasaron a la provincia de Galilea: “de la sanctidad della basta decir que Christo nuestro redemptor la paseó muchas veces y en ella hizo las maravillas que en los coronistas sagrados leemos”.

El primer lugar al que el compositor hace referencia es “una iglesia caída” que se encontraba en una pequeña aldea que llama “Ianim”: “donde sanó Christo a diez leprosos” (San Lucas 17:12-16). El lugar al que se refiere Guerrero es Burquin, a unos cinco kilómetros al oeste de Yenín. Aquí se encuentra la iglesia de San Jorge, también conocida como la iglesia de los Diez Leprosos, considerada la tercera iglesia cristiana más antigua del mundo. La tradición retrotrae la construcción del primitivo templo al siglo IV y dice que la construyó Santa Helena para conmemorar la sanación de los diez leprosos, hecho que se ubica en este paraje. Sigue en uso por la comunidad ortodoxa cristiana de Burquin.

Tres “leguas” (unos 18 kilómetros) más adelante, Guerrero nos dice que pudieron contemplar cuatro montes: el Monte Carmelo, “cerca del mar Mediterráneo”, el monte Hermón, el monte donde estaba Nazaret y el monte Tabor. El compositor sitúa el monte Hermón “a la parte de Levante y junto a él está la ciudad de Naym, adonde Christo resuscitó al hijo de la viuda [Lucas 7:11], agora es una pequeña villa, pasamos como a una legua”. Se estaba refiriendo al collado de Moré, conocido también como Pequeño Hermón, a cuyo pie se encuentra la aldea de Naín. El monte Hermón realmente está muy distante de este punto y su cumbre se extiende a ambos lados de la frontera entre Siria y Líbano.

Continuando su camino, pasaron por Nazaret, lamentándose Guerrero: “no subimos al lugar, aunque estaba cerca, porque nuestros moros no nos dejaron. Vimos blanquear las ruinas de los edificios”. Tal vez la frustración del compositor de no poder ir a visitarla, estando a los pies de un lugar tan emblemático para los cristianos, donde se había producido la Encarnación de la Virgen, hace que se desquite describiendo con todo detalle la casa en la que se había producido este hecho: “de doscientos años a esta parte, los ángeles la llevaron a Italia, al lugar que se llama Loreto, habiendo estados en otros dos lugares”. La pormenorizada descripción que sigue a esta anotación, apunta a que Guerrero, en alguno de sus viajes a Italia, la había visitado, lo cual parece confirmarse cuando dice: “hay un altar en medio desta cámara angelical, donde decimos misa, que divide a una parte la chimenea donde la Virgen guisaba su ordinaria comida, esta dichosa chimenea está cubierta de plata y otras riquezas”. Nos da noticia también de que junto a esa iglesia de Loreto estaba “un sumptuoso colegio de la Compañía de Jesús, de muchas naciones”, lo que parece reforzar el conocimiento que tenía de este lugar.

El siguiente punto cartográfico de la narración de Guerrero es el monte Tabor, en el que los evangelios sinópticos según San Mateo, San Marcos y San Lucas sitúan la Transfiguración de Jesús ante los apóstoles Pedro, Santiago y Juan, el Apóstol:

“Llegados al pie de este sancto monte, vemos dos edificios caídos, uno al principio del monte y el otro en lo alto, donde estuvo Christo con sus discípulos Sant Pedro, y Sant Juan y Santiago y se transfiguró delante dellos y de Moisés y Elías. Allí se oyó la voz del Padre Eterno diciendo: Hic est filius meus dilectus”.

El camino continuaba por la planicie y dirigiéndose hacia el norte llegaron al mar de Galilea “que también se dice de Tiberiades”. Explica el compositor que no se trata de un mar, sino de un lago, “porque es de agua dulce y está a mas de doce leguas del mar Mediterráneo”. Guerrero se refiere, en este punto de la narración, a la captación de los discípulos citados por parte de Jesús, a su caminar y navegación por las aguas del lago, al milagro de los panes y los peces y a la aparición a los discípulos después de su resurrección.

El compositor describe el lago, alimentado por el río Jordán, y refiere que en sus orillas hay muchas poblaciones “que fueron en otro tiempo ciudades principales… al presente no hay más que ruinas”, entre las que destaca Cafarnaún, Corozaín y Betsaida. Fue en esta última donde pasaron la tarde y la noche: “es agora una villeta de menos de cien vecinos”. No existe unanimidad ni sobre la localización de la antigua Betsaida, para la que se proponen los lugares arqueológicos de Et-Tell y el asentamiento desértico de El-Araj, ni sobre el lugar que los peregrinos asociaban a esa ciudad, situado probablemente en Tabgda, entre Magdala y Cafarnaún, y en la que los evangelios, como señala Guerrero, decían que habían nacido San Pedro, San Andrés y San Felipe (Juan 1:44).

El compositor finaliza esta etapa proporcionándonos una serie de referencias sensoriales visuales y gustativas, no exentas estas últimas de una cierta gracia y fina ironía:

“Toda la comarca es de las hermosas que hay en el mundo, y muy fértil, de ganados, y frutas, y palmas. Comimos pescado deste lago, el cual nos supo muy bien, por ser de donde algunas veces lo comió nuestro redemptor y por ser bonísimo y por la devoción con que lo comimos y por la hambre que llevábamos”.

Para trazar la ruta que siguieron Francisco Guerrero y sus compañeros de viaje por los territorios de Palestina he usado los mapas históricos que proporciona la web Palestine Open Maps.

Resources

From Samaria to Bethsaida. Descriptio et situs Terrae Sanctae alio nomine Palestina multis preclaris historys et miraculis utriusque testamenti a Christo Salvatore nobilitata (1593)

Church of St George in Burqin

Nain. Little Hermon on the rigt (1887)

The lake of Tiberias looking towards Hermon. David Roberts (1855)

El viaje de Jesusalén. Francisco Guerrero (Sevilla, 1592), fols. 73r-78r

El viaje de Jerusalén. Francisco Guerrero. From Samaria to Bethsaida, eleventh stage (1588)