Capilla musical del convento de San Agustín (1623)

El convento de San Agustín tuvo una capilla musical, al parecer de vida efímera, en 1623. Según el cronista Francisco Henríquez de Jorquera, durante la celebración de un capítulo provincial en este convento, se congregaron: “todos los padres doctos de la provincia de Andalucía, reino de Granada y reino de Murcia, que fueron en grande número con grandes aparatos de música que truxeron del convento de Córdoba y del convento de Sevilla [...] Determinose en dicho capítulo de que se quedase la música en este convento de Granada, aunque no duró mucho el conservarse en él porque se le vedó el salir a las fiestas y entierros, con lo cual se fueron”. Esta noticia plantea algunas incógnitas. Los músicos que se quedaron en el convento granadino no pensamos que fueran los de los cenobios cordobés y sevillano que, en principio, debían ser religiosos profesos en esas instituciones y debieron regresar a ellas al finalizar el capítulo provincial. El que abandonaran el convento de Granada por la prohibición de realizar servicios en el exterior, nos hace suponer que eran músicos laicos que necesitaban completar los salarios con los ingresos que generaban esas actuaciones, como era habitual en las otras capillas musicales de la ciudad.